jueves, 25 de diciembre de 2025

Desaparecido en combate 4 - La vida da muchas vueltas

Aquí estamos, casi 9 años después de la última entrada. Es lo que tiene dejar las cosas "para mañana". Pongámonos al día.

1 - ¿Qué leñe ha pasado?

Pues que el grado de ASIR (Administración de Sistemas Informáticos en Red, un grado superior de formación profesional) me tuvo muy absorbido, terminando éste mi madre enfermó y murió, entré en depresión, tuve que ponerme a estudiar inglés (que no me gusta nada), lo que me llevó a una depresión más profunda, luego volví a mi antigua carrera (curso puente de Arquitectura Técnica a Grado en Edificación), lo que aún me sumió más en la depresión, terminando este curso mi padre también enfermó y murió, mientras le cuidaba empecé a sufrir graves ataques de ansiedad (desmayos incluidos), los papeles de la herencia fueron un caos, heredé más deudas que dinero, seguía sin trabajo, se juntó todo con el confinamiento por el covid, el estrés me llevó a problemas de convivencia con mi pareja, mi perro enfermó gravemente varias veces, uno de mis mejores amigos acabó en prisión... Vamos, una historia digna de un culebrón o de una novela existencialista.

El hecho es que he estado sin fuerzas, ganas ni ánimos para nada. Además, perdí toda confianza en mí mismo y hasta dejé de participar en foros o de comentar en blogs.
Estoy en pleno proceso de recuperación, y uno de los pasos que creo que debo dar es volver a publicar, a exponerme a la crítica y a hacer cosas en vez de quedarme vegetando, como llevo haciendo estos años.

2 - Avances profesionales.

Pocos.

Me saqué el título de ASIR (con matrícula de honor, nada menos). Me saqué el B2 de inglés por Cambridge. No me saqué el Grado en Edificación porque no pude terminar el proyecto de fin de grado (cuidando de mi padre enfermo, no daba abasto), pero saqué varios sobresalientes en asignaturas sueltas.

Trabajé un tiempo como vigilante nocturno en un aparcamiento de camiones, pero mi salud no me permitió continuar (perdí unos 12~15kg de peso en menos de un mes). He estado haciendo algunos trabajos como aparejador: certificados, memorias descriptivas... y mi primer proyecto serio, aunque muy pequeño. Como informático, lo de siempre: reparar algún equipo, optimizar otro, dar algunas clases particulares de Informática básica...

3 - Vida personal.

Ahora mismo tengo para comer y para gastos gracias los ingresos del alquiler de un local que heredé de mi abuelo. Nada del otro mundo, pero me garantiza unos 500€ al mes limpios de impuestos. El piso en el que vivo, aunque oscuro y destartalado, también es de propiedad, así que no gasto en alquiler ni hipoteca. Con esas dos cosas puedo darme el lujo de vivir sin caprichos pero tranquilo; me considero un privilegiado.

Sigo con mi pareja (en unos días haremos 8 años juntos). Ella está opositando y va consiguiendo pequeños contratos temporales. No gana mucho al cabo del año, pero todo suma puntos para conseguir plaza y al menos no siente que sea una carga para mí.

Mi perro también murió. En fin, la vida...

4 - Linuxeando - La chicha de este blog

 Sigo usando Linux para (casi) todo, por supuesto. Estos años he probado todos los Ubuntu LTS que han salido, todas las versiones mayores de Debian, probé Manjaro, CachyOS, Q4OS e incluso algunas cosas más esotéricas. Ahora mismo estoy muy contento en Linux Mint con Cinnamon.

5 - Mis cacharros

Más o menos en la época en la que dejé el blog conseguí un portátil Asus con un i7 de 4ª generación, 8GB de RAM y una Nvidia GTX 950M, toda una bestia parda en aquel momento y el PC más potente que había tocado nunca. Lástima que el sistema Nvidia Optimus sea un desastre en Linux, que la pantalla integrada tuviera un equilibrio de color horroroso y que el "bicho" se caliente haga lo que haga (98ºC en CPU no puede ser normal). Probé de todo: Cambios de pasta térmica de calidad, limpiezas, soporte refrigerado, tests de estrés... Acabé creando un script para controlar el "throttling" a mano (eso da para una entrada o dos). Entre tanto, los años pasan, la tecnología evoluciona y las cosas se rompen: le cambié el disco mecánico por un SSD, le cambié el módulo WiFi por otro mejor, se le rompieron el lector de tarjetas, el cable flex del touchpad, el puerto Ethernet, le cambié el teclado... Aún lo tengo funcionando, pero no vale la pena seguir gastando dinero en un aparato obsoleto que ha cumplido con creces su vida útil.

Hace unos años me compré un MiniPC para el comedor: Phobos, una miniatura con un Intel J4125 y 8GB de RAM. Le puse Linux (obviamente) y lo tengo para ver películas en la tele, emular algunos sistemas (hasta GameCube), servidor de descargas, servidor básico de archivos y cosas así. Consume una ridiculez y cumple perfectamente como HTPC.

Hace pocos meses  me di un capricho: el pequeño Deimos, un portátil de 8 pulgadas, monísimo de la muerte, equipado con un Intel N100 y 12GB de RAM. Ahora mismo es mi ordenador principal. Ya escribiré largo y tendido sobre el pequeñín, porque me está dando mucho juego.
Aún tengo funcionando dos viejos netbooks de 2008~2010, ambos con micros Intel Atom de los primeros, a 32 bits. Uno lo tengo con WinXP para juegos de PC antiguos, y el otro con Debian e i3 para tareas básicas... aunque no estoy usando ninguno de los dos.

La que sí sigo usando aún en mi veterana PSP 2000, tuneada y en perfecto estado de revista. Le conseguí una MemoryStick Sony de 32GB de alta velocidad, le reemplacé el plástico de la pantalla por un vidrio anti arañazos, le puse carcasa y botones nuevos (ahora es negra con detalles rojo oscuro, chulísima) y tengo previsto instalarle uno de los nuevos firmwares (sigue con el 6.61ME). Compré un pequeño módulo de audio Bluethooth para usar auriculares inalámbricos, pero aún no me he animado a instalarlo.

6 - Mundo pingüino

Linux está viviendo una revolución detrás de otra: Wine/Proton han avanzado una barbaridad, SystemD ha sembrado ríos de tinta (electrónica), la transición de Xorg a Wayland está dando muchos dolores de cabeza a los usuarios domésticos, PlayOnLinux está muerto o moribundo, sustituido por Lutris, la arquitectura x86 de 32 bits prácticamente ha desaparecido (ya ni Debian la soporta), la irrupción de paquetes Snap y similares ha dividido a usuarios y desarrolladores... Ha habido muchos cambios, algunos para bien y otros... discutibles.



En fin, los años pasan, los años pesan, pero a pesar de ello hay que seguir pisando. O algo así, yo qué sé, no soy poeta. :P

La cuestión es que he vuelto con ganas de explicar cosas y contar batallitas, y no me falta material para escribir.

 

P.D.: Por si alguno me lee aún, un saludo especial para los viejos usuarios de TodoPSP, foro en el que empecé estas historias y que ya desapareció.